Recordemos que en el capítulo de la semana pasada, Hayley consiguió despertar a todos los Mikaelson consiguiendo la cura, y en su precioso reencuentro con Elijah quedaron en que irían a salvar a Klaus. Pues bien, todos los hermanos se ponen en marcha para ir a por éste, pero claro, han de elaborar un plan para salvarlo rápidamente ya que sus vidas corren peligro por Marcel y sus secuaces, así que deciden hacer un hechizo localizador para encontrar a Klaus. Para que el plan salga bien, Rebekah se ofrece a distraer a Marcel mientras que los demás salvan a Klaus. En un principio, a Elijah no le hace ni pizca de gracia esto último, pero al final, cede.
Kol, que estaba vigilando a Josh, descubre el plan de Marcel por un mensaje que éste le había mandado a Josh, así que va a por Rebekah y entre los dos, acaban con los aliados de Marcel que la estaban vigilando.
Mientras tanto, Elijah, Freya y Hayley van a por Klaus. Elijah se dirige a luchar contra Marcel mientras que Freya, con la ayuda de Hayley, intenta romper el hechizo que tiene preso a Klaus. Freya, al final consigue romper el hechizo, Klaus, con la ayuda de su Camille imaginaria, consigue sacarse la daga y cuando sale, se la clava a Marcel y todos lo hermanos se escapan junto a Hayley.
Todo parecía estar saliendo bien, hasta que Marcel consigue sacarse la daga y aparece delante de ellos. Klaus intenta llegar a un pacto con Marcel, en el cual, ellos no volverían a New Orleans si les dejaba en paz. Marcel acepta de manera altiva, ya que les dice que es él quien decide dejarles vivir y los Mikaelson por fin consiguen irse.
Pasando a otra trama tenemos a Vincent intentando buscar a Adam que desapareció en el pasado capítulo mientras perseguía el misterioso símbolo de magia negra, y parece ser que él tiene algo que ver con el símbolo ya que llama a Marcel diciéndole que toda la ciudad está en peligro por su culpa, mientras sostiene un cuaderno con el símbolo grabado...
De este capítulo destacaría la conversación entre Klaus y el fantasma de Camile, ha sido un momento precioso que ha hecho que Klaus cobrase fuerza luchando contra todos sus miedos, ya que al final esto ha sido un gran factor para salvarse. En cuanto al momento más tierno del capítulo, sin duda, cuando todos llegan a casa y Klaus ve a Hope dormidita después de cinco años ha sido demasiado, estoy deseando ver el siguiente capítulo para verlo ejercer de padre. Por cierto, cada vez Marcel me cae peor, necesitaba decirlo. espero no se la única que lo odia.
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