| REVIEW | La Cocinera De Castamar S1 - Muertes, traiciones y libertad


Hace unos meses os publiqué la review del primer episodio de La Cocinera de Castamar, de esa introducción a todas las tramas que estaban por llegar. Hoy, al fin, puedo traeros la review de la temporada completa de una serie que ha tenido traiciones, muertes, libertades y muchas historias de amor.

Contiene Spoilers

Han pasado tantas cosas, tantas ramificaciones, tantas tramas, amores, desamores, venganzas... Que en realidad no sé ni como empezar esta review, solo sé que es una serie que a pesar de que no me ha vuelto loca, me ha gustado y mucho, porque tiene potencial y creo que en muchas ocasiones nosotros mismos nos podemos ver reflejados en ciertos personajes.

Al fin y al cabo todos en algún momento de la vida nos hemos enamorado de la persona incorrecta, nos hemos equivocado, hemos hecho algo de lo que nos hemos arrepentido, y quizás por eso la serie se siente tan cercana y familiar.

Pero más allá de todo esto, el simple hecho de tener un reparto de actores que son canelita en rama, merece la pena ver la serie, porque hay que reconocer que ver caras conocidas siempre es un plus, y si encima los actores hacen un trabajo de diez, entonces sabes que la serie va a ser buena.

Todo lo contrario a los personajes, que han sido bastante variados, desde los que nos han enamorado por completo, hasta los que se han convertido en los más odiados de la serie con diferencia.

Dejarme que os diga que Beatriz ha sido la que más boletos ha ganado en cuanto ha personaje odiado se refiere, y fijaros que su muerte me dio bastante pena porque en el fondo era buena persona y terminó sola por esa envidia y crueldad que tenía con los de su alrededor. Luchaba por viajar a las Américas y ser feliz, y sus actos solo la llevaron a una muerte en soledad.
Algo medianamente parecido ocurrió con Sol Montijos, que a pesar de que ella también buscaba esa felicidad con la que tanto soñaba lejos de su marido abusivo y grosero, lo único que consiguió fue morir en tierra de nadie y sin saber muy bien qué le pasó.

Vivía con un hombre que la usaba como objeto sexual cuando más le convenía, se alió con la única persona de la que debía haberse mantenido alejada y se enamoró de alguien a quien después tuvo que matar para poder protegerle. Digamos que Sol Montijos no tuvo nada y lo perdió todo al mismo tiempo, y a pesar de todo, era una mujer con buen corazón, a pesar de tomar tan malas decisiones.

Sin embargo Enrique de Arcona ha sido el ganador de esta lucha por ser el personaje más odiado, y es que no solo ha sido el villano de la historia, sino que todo ha girado en torno a él y no entorno a Diego de Castamar como en un principio esperábamos que fuese.
Su odio por el Duque de Castamar le convirtió en una persona oscura, fría y manipuladora que no sentía miramiento ninguno por los de su alrededor, si eso significaba que iba a conseguir su objetivo: matar a quien se quedó con la persona a la que amaba.

Trazaba planes de manera desesperada, manipulaba a todos los de su alrededor, y no solo le salían mal las jugadas, sino que terminó muriendo de la manera más absurda posible, y en frente de quien un día tanto odió. Y si, es irónico que Clara (el personaje de Michelle Jenner) fuese quien al final terminó con su vida, en vez de hacerlo alguien a quien tanto daño causó.

Pero si hay una muerte que nos ha dolido por encima de las de los demás, a pesar de que era cuestión de tiempo que ocurriese, fue la de Rosalía. Podemos estar todos de acuerdo que fue el personaje más puro que hemos llegado a ver en estos 12 episodios, y a la que más rápido le cogimos cariño, pero lo cierto es que su muerte estuvo anunciada casi desde el inicio porque poco podía aportar un personaje como ese.

Y con Francisco Marlango pasa, en parte, algo parecido. Nunca llegamos a conocerle de verdad, y no sé si fue por Maxi Iglesias o por el propio personaje, pero se le terminó cogiendo bastante cariño para lo poco que le pudimos ver en la serie. Me quedé con las ganas de verle en un ámbito distinto, de saber más de su vida, su pasado, su familia y de ese lado menos mujeriego.
Luego tenemos a Amelia, que digamos que está entre los personajes odiosos y los medio aceptables. No es que me haya gustado demasiado, de hecho me ponía más bien nerviosa porque iba de mosquita muerta y luego era mala a rabiar, pero no merecía el final que ha tenido.

Ella también tomó malas decisiones, también se juntó con quien menos le convenía por asegurarse un futuro, y cuando estaba a punto de tenerlo todo, terminó sin el hombre al que amaba, repudiada por la gente y dando a luz a un hijo al que todavía no conoce.
Clara y Diego, sin embargo, sin que terminaron consiguiendo lo que tanto ansiaban. Ella terminó publicando ese libro de recetas que un día empezó a preparar, mientras que él consiguió superar la muerte de Alba, para ser feliz junto a la mujer a la que ama.

Me ha gustado mucho ver esa pelea interna entre lo que debes hacer y lo que realmente quieres hacer, porque uno no elige de quién enamorarse y a veces, esa persona no es la correcta, pero también es cierto que esperaba ver más de esta historia de amor más allá de cuatro miradas y unas cuantas sonrisas, porque hubiese sido interesante verles teniendo una relación a escondidas de los demás.

Cierto es que su historia termina en boda y con Diego renunciando a su cargo como Duque para poder estar con ella, pero lo que prometía ser una gran historia de amor, terminó siendo algo plano y a veces forzado que te deja con un sabor agridulce.

Todo lo contrario a la historia de amor entre Elisa y Roberto, en la que se veía la complicidad de los actores, y de los que me ha faltado una boda o una escena final como "cierre" a su trama.

Ambos me han parecido completamente maravillosos, y la amistad entre Elisa y Clara me fascinaba hasta llegar a verlas incluso como hermanas, pero me ha faltado ver más de ellos y su pasado.
Por último tenemos a Gabriel, que a pesar de que era un personaje más bien secundario, podría decirse que es el que ha tenido una trama mucho más impactante y dolorosa, ya que no solo su infancia fue dura, sino que además el hecho de ser una persona con color, no ayuda a la hora de encontrar la felicida.

Es la trama personal que más se ha explorado y la que más me ha gustado por todo lo que eso conllevaba, y aún así, siento que su relación con Amelia terminó siendo muy precipitada a pesar de estar siempre presente, y que de nuevo, se quedó un poco a medias su cierre en el final de la temporada.

En resumen, La Cocinera de Castamar es una serie que lejos de ser la mejor del mundo, engancha y entretiene lo suficiente como para verte los 12 episodios de seguido. Su final quizás ha sido un poco apresurado y sus tramas han terminado medianamente cerradas, a pesar que otras se han quedado abiertas.

No sé si habrá segunda temporada o no, si me tuviese que aventurar, diría que no ya que la historia central que era la de Diego y Clara ya tiene su final y ahora él ya no es Duque así que no tendría mucho sentido, pero he disfrutado mucho viéndola y un gran entretenimiento para las tardes de los Domingos.

Ahora os toca a vosotros contarme qué os ha parecido la serie, si habéis echado algo en falta, si os ha sobrado algo, si creéis que tendrá segunda temporada y si tenéis alguna teoría con respecto a esas tramas que se han quedado abiertas.

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2 comments

  1. Me ha encantado!! Pero comooo no mencionaas a Gabrieel. Si era el mejoooor!!!

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    1. Primero de todo, gracias por leerme, y segundo, sabía que se me olvidaba comentar algo jajajaja. Han pasado tantas cosas que seguro que se me pasaba algo. No te preocupes que voy a ver cómo edito el post para hablar de Gabriel, aunque indirectamente ya lo menciono en algún momento

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